Un tribunal de distrito de Estados Unidos dio su veredicto en uno de los casos más comentados en el mundo cripto: Caroline Ellison, quien fuera la asesora principal de Sam Bankman-Fried, recibió una sentencia de dos años de prisión. Este veredicto se suma al drama ya vivido por Sam Bankman-Fried, el fundador de FTX, quien en marzo pasado fue condenado a 25 años tras la cárcel, tras ser hallado culpable de un fraude valorado en 8 mil millones de dólares.

La figura de Ellison toma relevancia no solamente por su relación personal con Bankman-Fried, sino también por su papel activo en el engranaje detrás del fraude. En 2022, Ellison admitió su culpabilidad en siete cargos de fraude, responsabilidad que la unió nuevamente al destino de Bankman-Fried, extraditado aquel mismo año desde las Bahamas hacia Estados Unidos. Ellison, antaño al frente de Alameda Research, fue responsable de canalizar los fondos de FTX hacia ésta, generando un velo de opacidad ante los inversionistas.

Sanjay Wadhwa, director de la SEC, dejó claro que tanto Ellison como Wang sostuvieron un esquema diseñado para esconder información fundamental a los inversionistas de FTX. Sin embargo, fue el testimonio de Ellison en el juicio penal contra Bankman-Fried lo que cimentó su rol como testigo clave en el caso. Su aportación fue tan significativa que los fiscales lograron que el arresto domiciliario y la fianza de Bankman-Fried fueran revocadas. El tribunal, de acuerdo con evidencias presentadas, determinó que Bankman-Fried trató de interferir en su declaración, incluso intentando comunicarse con el abogado general de FTX y compartiendo escrituras personales de Ellison con un reportero de The New York Times.

Este último episodio significó un punto de inflexión, ilustrando la presión ejercida por Bankman-Fried para socavar el valor testimonial de Ellison, calificando sus acciones como un intento de dañar su integridad, sobre todo entre los potenciales jurados. La situación llegó a tal extremo que el juez consideró apropiado encarcelar a Bankman-Fried mientras esperaba su juicio.

A pesar de esta tormenta de eventos, Ellison mostró remordimiento en su declaración antes de ser sentenciada, pidiendo perdón a las víctimas afectadas por su conducta. Su colaboración determinante en la investigación fue reconocida por los fiscales como “ejemplar” en un memorando remitido al juez. Sin embargo, su arrepentimiento y cooperación no han evitado la resolución jurídica de enfrentar prisión, seguida de tres años bajo libertad supervisada.

La saga FTX, que una vez simbolizó el auge de las criptomonedas, sigue siendo un capítulo turbulento en la historia reciente del sector financiero, recordando los riesgos inherentes y las consecuencias de las malas conductas en un terreno tan explosivo y en crecimiento.