El universo sigue guardando sus secretos, pero cada vez estamos más cerca de desvelarlos gracias a las maravillas tecnológicas como el Telescopio Espacial James Webb. Recientemente, el Webb capturó una imagen impresionante de una supernova a 3.6 mil millones de años luz de la Tierra que está proporcionando datos críticos para entender la expansión del universo.
En una región del espacio dominada por la galaxia PLCK G165.7+67.0, caracterizada por su alta tasa de formación estelar, los científicos decidieron observar un evento especial: la explosión de una enana blanca que aparece en un único fotograma en tres momentos diferentes de su vida. Algo notable es que este fenómeno ocurrió gracias a un cúmulo de galaxias que actúa como una lente gravitacional, curvando la luz y mostrándonos la supernova desde múltiples ángulos.
Dr. Brenda Frye, de la Universidad de Arizona, comparó este espectáculo cósmico con un espejo trifácil que refleja una imagen múltiple. Este extraordinario hallazgo es en realidad el Tipo Ia de supernova más distante observado hasta la fecha en un sistema binario. La imagen muestra el evento comenzando, alcanzando su mitad, y acercándose al final - una secuencia increíble que ofrece pistas sobre el comportamiento del universo.
Esta imagen puede ser utilizada para calcular el valor de la constante de Hubble, conocida como H0, que mide la tasa de expansión actual del universo. Desde hace años, los científicos no logran acordar un valor preciso de esta constante. Valores previos oscilaban entre 69.8 y 74 kilómetros por segundo por megaparsec, mientras este nuevo equipo informó un valor de 75.4, con un margen de error considerable.
El supernova fue nombrada SN H0pe debido a las esperanzas que despierta en la comunidad científica para entender mejor el universo en expansión. Sin embargo, el propio Frye reconoce que aún queda mucho por explorar para reducir la incertidumbre y afinar los cálculos.
Como Wendy Freedman y su equipo destacaron en el año 2001, cuando hallaron un valor de 72 para la constante de Hubble, la medición de esta constante en el universo joven difiere de las más recientes, generando cierta tensión entre resultados. La imagen del Webb podría ser la clave para conciliar estas discrepancias y ofrecer una ventana a la historia y edad del cosmos en la que habitemos.