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viernes 11 de de 2024

Tiburones: Los Nuevos Campeones en el Equilibrio de los Ecosistemas Marinos

En un giro inesperado de los acontecimientos en el mundo marino, un equipo de científicos australianos liderado por el ecólogo Jeremy Day de la Universidad de Newcastle ha descubierto el papel definitorio de los tiburones en el control de la creciente población de erizos de mar de espinas largas en las costas del sureste de Australia. Este descubrimiento podría proporcionar una solución a un problema ecológico cada vez más serio.

Con el cambio climático intensificando la Corriente de Australia del Este, se ha observado un desplazamiento de las aguas tropicales hacia el sur, llevando consigo a diversas especies y alterando las complejas redes alimentarias de los arrecifes templados. Esta completa reconfiguración ha permitido que los erizos de mar proliferen, devastando las exuberantes camas de algas marinas y transformando estos ricos ecosistemas en páramos de erizos desolados.

Tradicionalmente, se había considerado al langostino oriental, Sagmariasus verreauxi, como un depredador clave en la restricción de la población de erizos. No obstante, los resultados del estudio desarrollado cerca de Wollongong, donde cien erizos fueron colocados estratégicamente cerca de un refugio conocido de langostas, han planteado serias dudas sobre su papel en este equilibrio marino. La filmación realizada mostró que las langostas apenas mostraron interés en los erizos de espinas largas, desvelando su predilección por los erizos de espinas cortas nativos.

En un sorprendente giro, los tiburones, tradicionalmente no considerados en los modelos de depredadores de erizos, demostraron ser los campeones inesperados. Los tiburones cornudos crestados (Heterodontus galeatus) se llevaron la mayor parte del protagonismo, siendo responsables del 82% de las muertes de erizos de espinas largas registradas, incluso atreviéndose a atacar a los erizos maduros, aquellos que se pensaba estaban fuera del alcance de los depredadores comunes. Los tiburones de Port Jackson también jugaron su papel en la eliminación de esta alimaña marina.

Con una presencia de más de 20 años de medidas protectoras en el sureste de Australia, los esfuerzos por regular el número de erizos a través del manejo de depredadores han tenido resultados poco esperados, lo que subraya la complejidad de las interacciones depredador-presa. La investigación publicada en Frontiers in Marine Science destaca la necesidad de reevaluar el entendimiento de estas relaciones y concienciar sobre la importancia crucial de los grandes depredadores en el mantenimiento del equilibrio ecológico.

Este nuevo conocimiento ofrece no solo respuestas, sino también oportunidades para optimizar las estrategias de gestión en las zonas costeras afectadas por estos problemas. La aplicación de estos hallazgos puede ser crucial para la preservación de la biodiversidad y el bienestar de los ecosistemas marinos ante un desafío climático constante.