La reciente presentación de Ursula von der Leyen sobre el diálogo estratégico para el futuro de la agricultura en la Unión Europea ha vuelto a poner sobre la mesa tensiones existentes en el sector. La polémica se centra, sobre todo, en la recomendación de promover dietas basadas en plantas, considerada “realmente peligrosa” por algunos representantes como Coldiretti, el mayor sindicato agrícola de Italia.
Este diálogo estratégico, que congregó a 29 actores clave del sector durante siete meses, ofreció a muchos la esperanza de alcanzar un consenso entre agricultores, ONGs y otros sectores. Sin embargo, Copa-Cogeca, el lobby agrícola europeo más influyente, ha manifestado su descontento con las recomendaciones finales. Consideran que sus intereses no han sido representados adecuadamente, ya que de los 29 participantes, solo cinco eran agricultores.
La respuesta de Copa-Cogeca ha sido especialmente dura con la idea de priorizar a pequeños agricultores y dietas descarbonizadas, un aspecto que no ha sido del agrado del sector ganadero, que se siente amenazado. Las protestas no se han hecho esperar: durante un evento agrícola en Hungría, miembros del lobby criticaron fuertemente a su presidencia.
En una carta enviada a la Comisión Europea, Copa-Cogeca ha solicitado más representación de grupos agrícolas en futuras deliberaciones y un cambio hacia un formato de diálogo más organizado y transparente. Temen que, de continuar en esta línea, la Unión Europea pueda vivir un episodio de inestabilidad en el sector alimentario.
En medio de este clima de tensión, Jan Doležal, presidente de la cámara agraria del AKČR checo, señaló que el objetivo del diálogo era precisamente calmar las protestas de los agricultores. No obstante, la mayoría del diálogo fue percibida como un esfuerzo unilateral en favor de los legisladores.
Von der Leyen busca, sin embargo, transformar las conclusiones del diálogo en una “visión” legislativa para el futuro de la agricultura en la UE, pero las críticas de Copa-Cogeca y sus demandas de mayor inclusión de organizaciones sectoriales podrían complicar la implementación de dichas propuestas.
Finalmente, a pesar de las diferencias, algunos representantes aceptan el informe con reservas, viendo el potencial de continuar con las negociaciones en el futuro. No obstante, persisten las divisiones en cuanto a los métodos y el contenido del diálogo y las recomendaciones propuestas.