Seúl ha convocado al embajador ruso en Corea del Sur para expresar su enérgico rechazo a la presencia de soldados norcoreanos en el conflicto de Ucrania. El Vice Ministro de Relaciones Exteriores de Corea del Sur, Kim Hong Kyun, instó al diplomático a facilitar la retirada “inmediata” de las tropas norcoreanas y catalogó cualquier cooperación militar de Corea del Norte con Rusia como ilegal. Esta advertencia surge en medio de una escalada de tensiones tras el anuncio de que Pyongyang ha movilizado hasta 12,000 soldados hacia el frente ruso.
El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, ha manifestado su profunda preocupación, calificando la participación de las fuerzas norcoreanas en la guerra como “una grave amenaza para la seguridad mundial”. La intrincada situación se complica aún más con las declaraciones del portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, quien señaló que las acciones conjuntas con Corea del Norte son de “soberanía” rusa y no suponen un peligro para terceros países.
Fuelando aún más la incertidumbre, varios videos circulan en la plataforma Telegram mostrando supuestamente soldados norcoreanos en bases militares rusas. Aunque el Kremlin ha disputado la veracidad de dichas imágenes, refiriéndose a ellas como “noticias falsas”, el temor y las especulaciones siguen aumentando.
Por su parte, la OTAN ha solicitado a Corea del Sur que brinde un informe detallado al respecto, subrayando la seriedad con la que el bloque militar transatlántico percibe la situación en el Este de Europa. Esta convocatoria añade presión a la ya tensa dinámica geopolítica, involucrando a múltiples actores internacionales en un nudo de alianzas y desconfianzas mutuas.
La asociación estratégica firmada en junio entre Kim Jong Un y Vladímir Putin parece ser el telón de fondo de este despliegue militar norcoreano, estableciendo compromisos de asistencia mutua en caso de ataques a cualquiera de los países firmantes. Ante este complejo tablero, el dilema se centra en cómo reaccionarán las potencias mundiales y qué implicaciones tendrá esta alianza para la estabilidad internacional.