En la política de salud actual de la Unión Europea, se observa una fragmentación considerable debido a la distribución de responsabilidades entre múltiples departamentos. Esto ha generado preocupaciones entre los miembros del Parlamento Europeo, quienes cuestionan la falta de un liderazgo claro en la implementación de políticas clave. Este fenómeno se ha intensificado después de que importantes políticas de salud no fueran asignadas al comisario de salud designado, Olivér Várhelyi, sino a otros dentro del Colegio de Comisarios.
Esta dispersión de responsabilidades ha llevado a diferentes voces dentro del Parlamento a expresar su preocupación, señalando que una distribución ineficaz puede resultar en una falta de dirección clara. Sin embargo, hay quienes argumentan que compartir el trabajo relacionado con farmacéuticos, suministros genéricos y legislación sobre biotecnología puede aliviar la carga de cada comisario y promover una salud integrada en todas las políticas.
Ante esta situación, se plantea la importancia de que Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, aporte claridad para asegurar un enfoque cohesivo en la política de salud de la UE. Por otro lado, el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha hecho un llamado mundial para priorizar las inversiones en salud por encima de las de defensa, señalando que no debería haber “competencia” en la financiación entre las agencias de salud en tiempos de incremento en el gasto de defensa.
En el contexto internacional, Naciones Unidas ha reportado dificultades para llevar a cabo sus misiones humanitarias en Gaza debido a ataques dirigidos a trabajadores de la salud. En otras áreas, la República Democrática del Congo enfrenta un brote amplio de mpox, con 29,342 casos sospechosos y 812 muertes reportadas, poniendo de manifiesto la necesidad urgente de pruebas diagnósticas. Se espera que nuevos diagnósticos reciban aprobación de emergencia de la OMS.
Dentro de Europa, Hungría también enfrenta críticas respecto a sus capacidades para liderar la política de salud de la UE, especialmente dado su fracaso en abordar problemas de salud interna. Como respuesta, el secretario de Estado para la Salud, Péter Takács, asistió a la comisión parlamentaria para delinear las prioridades de su presidencia, entre las cuales se incluye aumentar la competitividad de la industria farmacéutica de Europa.
Finalmente, un estudio reciente mostró que una mayoría significativa de personas piensa que los líderes mundiales no están haciendo lo suficiente para adaptarse al cambio climático, un problema que ya afecta la salud en países en desarrollo. A pesar de las complejidades políticas y territoriales, tanto dentro como fuera de sus fronteras, la UE se enfrenta al desafío de consolidar y coordinar acciones para asegurar un enfoque más integrado, eficiente y justo en la atención sanitaria.