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sábado 21 de de 2024

El Debate por los Restos de Tito Divide a Serbia

El debate en Serbia sobre el traslado de los restos de Josip Broz Tito ha suscitado una polémica notable. Aleksandar Šapić, alcalde de Belgrado, propone exhumar al antiguo líder yugoslavo para llevarlo a su lugar de nacimiento en Kumrovec, Croacia, defendiendo que se trata de un asunto crucial para la identidad serbia. Sin embargo, el presidente serbio, Aleksandar Vučić, se ha mostrado contrario a esta idea, subrayando que Tito es una pieza integral de la historia de Serbia y Yugoslavia. Tito, quien gobernó Yugoslavia durante décadas, fue un líder carismático que equilibró el socialismo con relaciones internacionales tanto con Occidente como con Oriente, fundando el Movimiento de los No Alineados.

La iniciativa de trasladar sus restos está creando divisiones políticas, no sólo en el partido gobernante, el Partido Progresista Serbio, sino también en su coalición, que incluye a socialistas y ultranacionalistas como los Guardianes de Juramento Serbios. Entre tanto, prominentes intelectuales y ciudadanos del país se han expresado en contra de la propuesta, reconociendo a Tito como un símbolo de unidad en la región y respetado más allá de las fronteras de Serbia.

Mientras tanto, calles en diferentes capitales de los Balcanes, así como en países lejanos como Egipto y Brasil, siguen llevando su nombre en reconocimiento a su legado. Tito logró sustraer a Yugoslavia de la órbita soviética, cultivando amistades con líderes internacionalmente relevantes, como Winston Churchill y Fidel Castro, mientras promovía un tercer camino ideológico que influenció a líderes como Nelson Mandela.

La controversia no sólo gira en torno al posible destino de los restos de Tito, sino que también ha reavivado antiguas tensiones sobre interpretaciones de la historia y el futuro del nacionalismo serbio. La propuesta de Šapić de construir un monumento a Dragoljub Mihailović, un líder colabore nazi, complica aún más el ya tumultuoso panorama político.

Finalmente, este enfrentamiento resalta el delicado equilibrio que Vučić debe mantener, al tratar de honrar un legado histórico que aún divide opiniones, mientras busca fortalecer la posición internacional de Serbia a través de la diplomacia multilateral. La discusión sobre Tito se convierte así en un reflejo de luchas contemporáneas en la región por definir el pasado en función de visiones futuras.