Epic Games ha decidido llevar a los tribunales a Google y Samsung al acusarlos de complicar en exceso el proceso de descarga de su Epic Games Store en dispositivos móviles, siendo Samsung el último en añadirse a esta batalla legal. Todo se centra en la función Auto Blocker de Samsung, que por defecto impide la instalación de aplicaciones de terceros bajo el pretexto de la seguridad, limitando la instalación únicamente desde Google Play Store y Samsung Galaxy Store, a menos que el usuario desactive esta función manualmente.

Tim Sweeney, CEO de Epic Games, ha señalado esta situación, sugiriendo incluso la posible colaboración entre Google y Samsung para restringir la competencia, aunque admite la falta de pruebas concretas de tal cooperación. Para evidenciar estas complicaciones, el periodista Sean Hollister de The Verge decidió poner a prueba la afirmación utilizando su propio dispositivo Samsung. Hollister confirmó las dificultades, ya que no encontró instrucciones claras sobre cómo desactivar el Auto Blocker. Tuvo que buscar específicamente “desactivar el auto blocker” para encontrar la solución.

Este nuevo enfrentamiento en los tribunales no es un evento aislado para Epic Games. Previamente, la compañía demandó y ganó a Google, argumentando que la empresa mantenía un monopolio ilegal sobre la distribución de aplicaciones y servicios de facturación en dispositivos Android. Además, Epic Games también logró obtener un fallo a su favor contra Apple, en donde la Unión Europea obligó a Apple a permitir la instalación de Epic Games Store en sus dispositivos, aunque Apple manifestó que su aceptación era solo temporal.

La respuesta de Google y Samsung ante esta nueva querella es incierta, sin embargo, se prevé que resistirán los reclamos de Epic, al menos en un principio. Siendo la guerra legal de Epic Games contra estas gigantes tecnológicas todavía muy reciente, solo queda esperar cómo evolucionarán los procedimientos legales para resolver estas acusaciones de competencia desleal.