Nintendo ha vuelto a tomar medidas fuertes contra la comunidad de emulación, cerrando uno de los proyectos más prominentes, Ryujinx, un emulador de código abierto que permitía jugar a juegos de Nintendo Switch en sistemas operativos como Windows, Linux y Mac. Luego de ser contactado por Nintendo con una oferta para detener el proyecto, el desarrollador de Ryujinx decidió retirar el código fuente de su repositorio en Github. Aunque el software seguirá funcionando para quienes lo tengan instalado, el proyecto ya no contará con soporte oficial.

El anuncio se hizo tanto en el servidor de Discord del emulador como en Twitter, donde se compartió un mensaje que, aunque escueto, clarificó la influencia de Nintendo en esta decisión. Solo el mes pasado, Ryujinx capturó la atención al ejecutar el juego “Legend of Zelda: Echoes of Wisdom” a más de 120 fotogramas por segundo, demostrando capacidades más allá de las del propio hardware de Switch.

Nintendo ha mostrado repetidamente su postura rigurosa contra los emuladores. En 2023, incluso colaboró con una firma de ciberseguridad para frenar la piratería de juegos. No es la primera vez que Nintendo enfrenta a proyectos de emulación; anteriormente, alcanzó un acuerdo millonario de 2,4 millones de dólares con el emulador Yuzu, y aplicó masivas 8,535 órdenes de eliminación DMCA para retirar su código de Github.

A través de estos movimientos, está claro que Nintendo continúa dedicándose a proteger su propiedad intelectual con uñas y dientes. Sin embargo, esta agresiva estrategia genera debate dentro de la comunidad de jugadores y desarrolladores, que ven en la emulación una forma de explorar juegos de manera no oficial. La presión de Nintendo sobre Ryujinx es solo el último episodio en esta batalla perpetua entre los intereses de las grandes corporaciones y la libertad tecnológica en el ámbito del software y el gaming.