En un giro inesperado de eventos, el popular creador de aplicaciones Christian Selig se ha visto obligado a retirar su aplicación Juno de la App Store del Vision Pro. La decisión fue tomada tras una queja de Google, que argumenta que Juno, su apreciada herramienta para ver YouTube, infringe sus derechos de marca registrada. La implicación de que el código de Selig “modifica” la página web de Youtube levantó cejas, sobre todo porque se asemeja a problemas anteriores con Apollo.
Hoy en día, cualquier fanático de la tecnología sabe lo cambiante que puede ser el entorno de las apps. Selig, el cerebro detrás de Apollo, la famosa aplicación de Reddit, ya se había enfrentado a desafíos sustanciales cuando Reddit modificó sus políticas de API, lo que llevó al cierre de la aplicación y a un revuelo masivo entre la comunidad de usuarios de Reddit.
Juno, originalmente concebida como un simple “proyecto de hobby”, ha sido retirada por merecedores motivos legales, según Google. El gigante tecnológico asegura que la aplicación violó las directrices al modificar el sitio web de YouTube sin autorización, referenciando específicamente los “trademarks e iconografía” en cuestión. Sin embargo, Selig se apresura a enfatizar que Juno es meramente un “webview” que actúa más como una extensión del navegador.
Llama la atención que Google aún no ha proporcionado su versión oficial del asunto ni ha anunciado una fecha específica para lanzar su propia aplicación de YouTube en Vision Pro, aunque en febrero comunicó que estaba “en nuestros planes”.
En tanto, los usuarios que ya adquirieron Juno pueden seguir utilizándola con normalidad, aunque el futuro de la app es incierto si alguna actualización de YouTube deteriora su funcionalidad.
Así queda un panorama interesante: Selig, lejos de buscar rencillas, parece más bien resignado a ver cómo este capítulo se cierra sin más complicaciones. A fin de cuentas, mientras que Google mantiene su postura de defensa de marca, creadores independientes como Selig continúan empujando los límites de la innovación, aunque sea solo con sinceros proyectos de desarrollo.