La empresa 8BitDo ha lanzado un innovador kit de modificación que promete transformar los nostálgicos controles GameCube en dispositivos inalámbricos, compatibles tanto con Nintendo Switch como con Android. Este kit, que cuesta 26,00 €, es de instalación sencilla y no requiere soldadura, lo que lo hace accesible para la mayoría de los usuarios que deseen actualizar sus mandos de la era de los 2000.

El lanzamiento, anunciado el 14 de septiembre de 2024, agrega una nueva dimensión a los tradicionales mandos GameCube al integrar tecnología Bluetooth. Además, para los puristas que deseen mantener la esencia del GameCube original, pueden obtener un receptor Retro Receiver, también valorado en 26,00 €, que permite la conexión inalámbrica con la consola clásica. Este receptor se vende por separado.

Con el kit se incluye una batería recargable de 300mAh, capaz de garantizar aproximadamente 6 horas de juego continuo, así como joysticks de efecto Hall y un pack de gatillos, potenciando la experiencia de juego clásico con tecnología actualizada.

El periodo de pre-ordenes ya está en vigor, y la empresa asegura que comenzará a despachar las unidades a partir del 25 de septiembre. Esta iniciativa sigue la línea de otros productos competidores, como el adaptador GBros de la misma 8BitDo o el oficial de Nintendo, que conectan controladores antiguos al Switch, pero el kit elimina la necesidad de estos dispositivos intermedios.

Para realizar el cambio, los usuarios tan solo necesitan abrir el mando original y reemplazar la placa de circuito impreso antigua por la nueva incluida en el kit, simplificando el proceso de actualización sin mayores complicaciones.

Con este movimiento, 8BitDo refuerza su compromiso con los gamers más nostálgicos, permitiéndoles revivir la experiencia que marcó su juventud mediante la compatibilidad con las plataformas de juego más actuales. Esta fusión de lo viejo con lo nuevo ofrece una moderna perspectiva a los jugadores, que ahora pueden disfrutar de sus juegos favoritos con las comodidades del presente.

Esto es un claro ejemplo de cómo las innovaciones tecnológicas pueden revitalizar lo clásico, ofreciendo a los usuarios no solo una mejora en la experiencia, sino un guiño al pasado que resulta altamente evocador.